miércoles, diciembre 27, 2017

Perdigon 84 :LA LEY MORDAZA




REBELDES
por BISCÚTER.
Los salarios siguen siendo igual de bajos, las condiciones laborales igual de salvajes, ninguno de los recortes sociales se ha revertido; la ley mordaza sigue aplicándose en detrimento de nuestras libertades (nunca la violencia del estado puede justificarse violando derechos fundamentales de personas que ampara la propia ley, Hannah Arendt dixit); la separación de poderes es una ficción y a diario el ejecutivo se pasa por el arco de triunfo al poder legislativo o intenta colocar a sus peones en las más altas magistraturas del Estado;  la corrupción sigue saliéndole gratis a Rajoy y el 155 se aplica en diferido, sobre todo si das mal ejemplo gestionando honradamente el Ayuntamiento de Madrid. Si con esta taza no vale, toma taza y media. Seguimos arrastrando una pesada herencia franquista, con más de 100.000 ciudadanos en las cunetas y con Francisco Franco enterrado en el mayor mausoleo público de
Europa dedicado a un dictador, custodiado por la Santa Madre Iglesia, ¡que ya tiene guasa la cosa! y sostenido con el peculio de todos. Sin duda la situación actual no es equiparable a la terrible dictadura del General, pero tampoco es óbice para no reconocer que, como decía Carlos Chirbes, este país sigue teniendo un cierto  tufillo a franquismo por todos sus costados. Y mientras tanto ¿qué nos queda de la constitución democrática del 78? Lo más valioso de aquella constitución fue la promesa de configuración de España como un estado social y democrático. Después de tres largas décadas de vida, lo que tenemos es un mediocre estado de medioestar y un capitalismo oligárquico de amiguetes, políticamente promiscuo y con síntomas de padecer una metástasis de corrupción.
Este panorama se ha empeorado con la fiebre de banderas y nacionalismos de diverso pelaje que nos invaden. A mí, como al dibujante El Roto, ese sentimiento me produce claustrofobia y tristeza, sobre todo pensando en los centenares de emigrantes  que huyen del hambre y las guerras y vienen a morir a las puertas de nuestras “maravillosas” fronteras y naciones. Y además también me genera mala hostia, porque semejante conflicto está ocultando la crisis social gigantesca que padecemos, en la que mucha gente tiene como preocupación principal no la independencia, sino la supervivencia. Se habla tal vez demasiado de emociones y se olvida algunas consideraciones materialistas fundamentales, como que la soberanía es hoy una quimera secuestrada por la troika, los bancos y los fondos buitres de inversión, verdaderas pesadillas para nuestras vidas. (Blackrock es el fondo norteamericano primer accionista del Banco Santander, BBVA, Iberdrola, Telefónica, Mediaset, DIA, Ferrovial, Repsol, Aena y Acerinox, por ejemplo). 
En el 2018 la inversión prevista en educación y sanidad será la más baja de toda la década; 300.000 españoles sufren extrema pobreza, con menos de 350 € por mes de renta; en el primer trimestre de 2017 hubo 17.000 desahucios; a medio millón de hogares le cortan la luz por impagos mientras que al director de una de las empresas eléctricas le pagan al día 43.000 €; en el último año se ha multiplicado por cuatro el dinero que tienen algunos españoles en paraísos fiscales y España ocupa el cuarto puesto por la cola en justifica social, según datos de la UE. Como dice Lagartija Nick a ritmo de rock…la lucha de clases ha vuelto, los pobres ponen los muertos y los ricos de puta madre.
Menos mal que nos queda Portugal… y Foucault, que dijo aquello de que toda forma de dominación engendra una forma de resistencia. Probablemente ya no habrá insurrección, ni corte revolucionario, como señala Jorge Alemán, pero sí rendijas por donde se cuele la historia y se articule una sensibilidad  colectiva distinta al desprecio por lo humano propio del neoliberalismo. La articulación de esta sensibilidad es la tarea mayor de una izquierda que no se deje seducir ni por el parque temático, ni por la tribu testimonial. Amador Fernández Savater comentaba, en un artículo sobre la conmemoración de los cien años de la revolución rusa, que una de las enseñanzas de aquel acontecimiento es que no se trata de derribar o apoderarse del Estado. “… La revolución social es un cambio desde dentro de las mismas relaciones sociales y de poder. Un revolucionario se plantea fundamentalmente transformar las cosas desde arriba, no desde abajo, al revés del rebelde social...”.
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MENDEZILLOS NEWS
Ingresan en un Centro de Internamiento de Extranjeros a los tres Reyes Magos
El ministro del Interior Zoido ha declarado que “ningún niño recibirá ningún paquete extraño” y que “¡Qué es eso de que vayan los negros y los moros de país en país por ahí sin pasaporte!”
Rosa Valdeón hará este año el reparto junto a Papá Noel
La DGT ha alertado a las rotondas para que “no se pongan en medio” y la Federación de Bebidas Espirituosas aconseja que junto al cubo de los renos se deje otro para la exdiputada del PP
Una investigación descubre el significado de las siglas CIS
Anteriormente se creía que era el Centro de Investigaciones Sociológicas, un organismo que realizaba encuestas, pero ya se conoce como a Ciudadanos les Inflamos los Sondeos
Un concejal del PSOE dice que alguien de otro partido hizo una vez una cosa bien
Inmediatamente dio muestras sinceras de arrepentimiento. Al parecer, fue víctima de un episodio fugaz de criterio propio y pensamiento crítico que afortunadamente ya ha superado
Diario de Burgos recibe el máximo galardón de la prensa machista en 2017
Javier Lacalle ha ofrecido a Méndez Pozo retirar de la Plaza Mayor la estatua de Carlos III y colocar su premio que consta de dos gónadas masculinas diseñadas por Calatrava
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¡Yo sí te creo!
LA MORADA
Ha quedado visto para sentencia el juicio contra los cinco mal­nacidos que violaron a una joven en Pamplona en las fiestas de los sanfermines del 2016.
Como hemos visto, los abogados de la defensa han utilizado todo tipo de estratagemas para desviar la atención mediática de sus clientes y hacerla recaer sobre la víctima, cuestionando como siempre, su verdad. En este caso la cuestión iba sobre el consentimiento o no a esas relaciones sexuales y sobre si hubo o no intimidación.
He de reconocer que leyendo algunas informaciones sobre esta estrategia me he planteado hasta qué punto está instalada en nuestro espacio simbólico colectivo la idea de que en el espacio público quien tiene la última palabra son siempre ellos.
Me parece muy cuestionable la deontología profesional de es­tos letrados al utilizar los argumentos que han utilizado, pero ellos sabrán los motivos. Lo que tengo muy claro es que la víc­tima, que ellos revictimizaron en el juicio, no creo que les pue­da perdonar. Yo no podría hacerlo.
Pero sobre lo que hoy quería reflexionar es sobre la responsabi­lidad que tiene ahora el tribunal que ha de dictar la sentencia. Y lo digo en varios sentidos.
Si absuelve a los violadores de la manada, a esos malnacidos cretinos, estará dando carta de naturaleza a quienes entienden que violar a mujeres y niñas es algo implícito a la condición de hombre y que va mucho más allá del deseo sexual. Se trata de la máxima expresión del sometimiento de las mujeres a manos de cualquier hombre. Es una peligrosa manera de entender la mas­culinidad y, por ello habrá que analizar con lupa esa sentencia y no sólo en los términos jurídicos, sino también en términos sociológicos y, por supuesto, con las gafas moradas puestas.
Además si se cuestiona la verdad de la víctima, el tribunal se­guirá aplicando la máxima de la falta de equidad a la hora de creer a mujeres y hombres por igual. O sea que dará por buenos los mitos existentes sobre las verdades de voces de las mujeres. Y esas verdades siempre son cuestionadas porque el patriarca­do así lo ha impuesto.
Si estos dos argumentos no son ya de por sí delicados, queda también el del impacto social, puesto que al ser un juicio tan mediático se han puesto en evidencia temas como lo que puede o no ser el consentimiento de las relaciones o lo que puede o no ser intimidación.

¿Nos imaginamos una situación inversa? Que sean cinco muje­res jóvenes y vigorosas las que hubieran acorralado a un joven solo en un portal y le hubiesen obligado a realizar algunos actos a los que él no dice no porque se siente intimidado, pero queda hecho una piltrafa cuando ellas, ya satisfechas de su felonía, desaparecen.
¿A que cuesta de imaginar?. Y cuesta de imaginar porque, pese a todos los avances conseguidos en materia de igualdad, el pa­triarcado sigue manifestando todo su poder en todos los ámbi­tos. Y el de los excesos en la calle es uno de ellos.
El sentido de la posesión, el de invencibilidad, el de “me apete­ce, lo tomo” sin mesura, etc. son algunas características de este tipo de malnacidos que abusan de todo. Ni imaginarme quiero al miembro de la manada que es guardia civil y que tenga que acudir a defender a una mujer que haya sido agredida por su pareja. En qué situación puede quedar esa señora…
Al patriarcado le interesa que haya este tipo de malnacidos para recordar quienes tienen el poder. Y también que haya le­trados que no solo cuestionan la verdad de la víctima, sino que hacen recaer sobre ella y su vida posterior toda la culpa de lo sucedido. Y es que hubo momentos en los que no se sabía si estaban juzgando a la manada o a la víctima de la violación en grupo de estos malnacidos.
Afortunadamente la fiscal, Elena Sarasate, puso nombre a las cosas. Y en su alegato final describió la acción como “conjunta y organizada” y que los hechos “se produjeron sin consenti­miento y bajo violencia e intimidación. Cuando los acusados terminaron y consiguieron lo que querían, la dejaron tirada y semidesnuda”.
En su intervención, esta fiscal desmontó el estereotipo del con­sentimiento. Es decir no hace falta decir NO para que no exista consentimiento. En todo caso, si no existe un SÍ claro, no se tiene porqué entender que haya habido consentimiento claro.
Y vuelvo a la responsabilidad del tribunal a la hora de dictar sentencia por todo lo que este caso ha puesto patas arriba.
Es posible que pese a la terrible lentitud con que se va movien­do todo lo que afecta a las violencias machistas y a las vidas de mujeres y criaturas que este terrorismo se lleva por delante, alguna cosa cambie.
Pero el patriarcado sigue ejerciendo su férrea posición y no va a permitir grandes cambios, y por ello quienes dicten sen­tencia, impregnados como están de filosofía patriarcal, en el mejor de los casos reconocerán los hechos y aplicarán penas más o menos ajustadas, pero no creo que se atrevan a aludir al daño moral causado a la víctima. Ese daño que la acompañará el resto de su vida y que nadie podrá reparar. Ese daño será la victoria del patriarcado sobre esa joven, y sobre todas las mujeres en forma de miedos constantes a ser agredidas por malnacidos hijos sanos del patriarcado asesino.
También este caso mediático está entrando en las escuelas y haciendo reflexionar a familias y personal docente sobre valo­res como el respeto, la aceptación del NO, la resolución pací­fica de conflictos, etc.
Seguramente dentro de unos años seamos capaces de reflexio­nar y de avergonzarnos como sociedad por no haber creído a esta mujer joven y de cómo algunos abogados son capaces de cuestionar esa voz sin importarles el daño moral que infligen ni la dignidad de la propia víctima.
Y es que como siempre ha dicho mi señora madre, de los erro­res también debemos aprender.
A ver si somos capaces, como sociedad, de evitar sufrimientos innecesarios y juicios paralelos a las víctimas de las violencias machistas de todo tipo.
Bonito y ordenado.
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Sólo de Palabra
por
El cocinillas
La burocracia es el empacho de las ideas. La sobremesa de las soluciones. Es el después de las promesas, del banquete, de las hermosas palabras. Es la resaca del Año nuevo donde la rutina enfría el dolor de cabeza de haber realizado todos los propósitos de enmienda para ser mejor, adelgazar o enfrentar los problemas. Pero una vez que alguien se sienta a la mesa de un banquete es muy difícil no dejarse llevar por la gula.
Es en ese estado donde está la reforma de le Ley Mordaza. Cabeceando en la mesa del banquete mientras los comensales discuten. Esa ley que nos pone directamente en la ruta hacia el fascismo al que nos llevan. Decía Voltairine de Cleyre “la libertad de expresión no significa nada si no significa la libertad para decir lo que otros no quieren oír”. Pues en esas mismas coordenadas estamos 100 años después de que falleciera esta eminente señora. Sumergidos en una ley donde uno ha de medir donde pone la coma más allá de donde pone la intención.  Una ley  a la medida para que aquellos que están dispuestos a cometer las mayores injurias e  injusticias desde el poder, y el monopolio de la violencia, no puedan ser contenidos ni contestados.
Tras las últimas elecciones, después del reparto de la representación parlamentaria, me consolaba con la idea de que la falta de mayoría del PP sirviera para verse obligado a derogar la Ley Mordaza y a meterse en asuntos tan urgentes como reforzar la sanidad y la educación públicas y crear una ley antidesahucios. Inocente. Es frustrante ver cómo la ley va condenando a izquierda y derecha (de éstos casi ninguno) mientras los representantes políticos juegan el tetris de los escaños.
No, ya no se trata de tomar el cielo sin consenso. Con leerse los expedientes, acudir a reuniones o sesiones y dar la réplica -aplaudido por los suyos- desde tribuna es suficiente. Socialmente los resultados son desastrosos. La burocratización total. El desencanto absoluto.  La Ley Mordaza campa a sus anchas con fiscales y jueces midiendo milímetro a milímetro nuestros actos y comentarios. Va para cuatro años esto de la Ley Mordaza, larga es la digestión. Como cuando alguien que da los buenos días en un día de tormenta o de ventisca: Feliz 2018 sólo de palabra.
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La navidad es solo invierno
por 
Rubén de la Peña

La navidad es solo invierno
crudo y desnudo,
para aquellos que intentan
esconder la vida entre los escombros.
La navidad es solo un momento más
de hambre, polvo y piedra.
Cuando las luces de sus noches las ponen
los morteros y el fósforo de las luminarias.
Son los nacimientos vivientes
de familias huyendo,
como niños sin portal,
al ritmo de las explosiones.
La navidad es solo ausencia de agua y esperanza.
Mientras las mismas fábricas que en occidente
hacen los juguetes para nuestros hijos,
arman las bombas que matarán a los niños en Oriente.
Oriente, la tierra de los Reyes Magos,
donde la navidad es solo invierno.
Cada vez que se mata a un niño,
desaparece la esperanza de que el mundo mejore.
Ejércitos, como eficaces empresas de mensajería,
llevan productos occidentales a los niños de Oriente.
Por eso allí los niños no piden regalos al cielo,
no vaya a ser que caiga algo sobre sus cabezas o encima de sus casas.
Y es que, para ellos, la navidad es solo invierno
solo Trump o Putin,
solamente cordita y fósforo.
La navidad es solo invierno añadido
al invierno de sus vidas.


POESÍA
DIOS ESTÁ EN PELOTAS
por GLORIA FUERTES

¡Ya está bien,
que se va a helar!
¡Tanto adorar al chaval
y nadie tiene cojones
de darle sus pantalones,
su mochila o su morral!
Tanta mirra y tanto incienso
y Él desnudito en el pienso…
pienso que nadie le quiere.
Su tiritera me hiere
en esta noche tan puta.
¡Muchachos, traed viruta,
vamos a hacer una hoguera,
antes que se nos muera
de frio la Salvación!
Dejaros ya de misa y de liturgia idiota
que Dios está en pelotas
desde que vino al portal.
Callaros si le queréis, que le da frio la guerra.
Juntad todas las banderas
y haced una colcha loca,
porque Dios
está en pelotas.
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¿Política? Dos casos significativos: Casado y Rufián
Por Andrés Sorel

La política se ha quedado sin lenguaje. Sin pensamiento. Sin confrontación dialéctica. Se ha convertido, como quería Goebels, en un catecismo alienante, en un circo. Mostramos dos de sus preclaros representantes: Casado, del partido popular, y Rufián, de ERC. Ambos, que representan a gran parte de los diputados o significativos políticos, pese a su subdesarrollo mental y analfabetismo ideológico, son de los más utilizados por las televisiones y medios de comunicación, para renovar teorías fascistas, uno, o convertir la dialéctica y el pensamiento en un repulsivo teatro de ínfima categoría, el otro. Pero las "redes sociales" gozan con la difusión de sus ¿palabras? o actos y no dudan en mostrar así la miseria cultural y política en que vivimos. Escuchamos gorgotear a ambos, y nos provocan la náusea y la tristeza. Las ciencias avanzan: el progreso retrocede. El lenguaje, gracias a ellos y a los millones que ellos dicen representar, ha dejado de existir. Y la política se ha sumergido en la cloaca que hace posible que una minoría de poderosos exploten inicuamente a la mayor parte de los ciudadanos. Así, los medios de comunicación y los partidos políticos que divulgan a semejantes personajes nacidos de las cloacas de la ética y la cultura, aunque se presenten como seres humanos, no solo no se avergüenzan de ellos sino que los exhiben y confrontan con asiduidad para mostrar como las ideologías y los lenguajes son arrojados al sumidero de la historia.

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Lo imposible solo tarda un poco más por Fernando Ortega Barriuso
En la bella primavera argentina, diversas asociaciones de la Memoria Histórica, erre que erre, han conseguido sentar –y que sean condenados- a un nutrido grupo de torturadores de la época de la Dictadura de Videla. Mientras, en este país tan demócrata y avanzado, después de diez años de la Ley de la Memoria Histórica impulsada por el presidente Zapatero, siguen nuestros muertos en las cunetas y montes sin que se hayan dado pasos más allá de alguno simbólico. Y, por supuesto, ningún atisbo de juicios, reconocimientos y Lugares de la memoria. ¡Sólo faltaría! parece que piensan nuestros dirigentes.
Y lo poco conseguido, casi siempre ha sido debido a la presión y demanda popular para restablecer un mínimo de cordura: exhumaciones, relatos, libros, páginas webs… Un esfuerzo titánico salvando multitud de obstáculos. ¡Bravo por ellos!
 En Burgos queda por ver en qué deriva esa propuesta del cambio del callejero. Y siempre quedará la pregunta –mientras haya muertos sin desenterrar-, tan sencilla y dura, de “¿Dónde llevamos las flores a nuestros muertos”. Con un presidente del Gobierno que se toma de chacota el cambio del nombre de calles y no ha hecho nada –sino poner palos en las ruedas- será difícil avanzar, aunque como dicen nuestros compañeros argentinos “Lo imposible solo tarda un poco más”.
Se termina el año y el balance que ofrece la sociedad en general y la burgalesa en particular no deja de ser desolador: guerras, explotaciones, trabajo infantil, violencia hacia la mujer, migraciones, pobreza energética, más ricos, más pobres… Un reparto desigual de la riqueza y del poder. Más de tres millones de españoles no llegan a mileristas. Está claro que en la escala depredadora del mundo el hombre no tiene depredadores, como el resto de los animales, y es él mismo el que ejerce de depredador hacia sus semejantes… “El hombre es un lobo para el hombre” (Plauto hace más de dos mil años).
Es triste, con todos esos grandes problemas que desbordan la energía del planeta azul bajar el foco a esta aldea pequeña en su tamaño que se llama Burgos, en la que el gris del granito va avanzando e identificando a la ciudad con ese espíritu fuerte y grisáceo, monolítico, duro, inalterable. Faltan proyectos, escasean voluntades de querer avanzar y modernizar, se obstaculizan iniciativas de larga mirada. El mismo presidente de la FAE, Miguel Ángel Benavente, lo comentaba recientemente: “¿Se imagina un consejo de administración como la corporación municipal? La empresa cerraría en cuatro días” y el concejal Fernando Gómez declaraba casi a la par que “el balance de la gestión municipal no puede ser más desalentador” al revisar el cumplimiento de los presupuestos de 2017.  Eso dicen sus amigos, con que “los otros” uno se puede imaginar.
Pues eso.
¿Será la C de Catedral la letra ilusionante? La C de cultura, de convivencia, de concordia…, palabras tan nobles al decir de Vicente Ruiz de Mencía. Uno conserva aún cierta capacidad de ingenuidad e ilusión pero todo hace prever que el montaje del centenario de la catedral, manipulado ya por la Cámara de Comercio y el Cabildo, será a mayor gloria de los susodichos y alguna otra institución, como la UBU o el Ayuntamiento, que han entrado de segundones.
No nos queda otra que mirar el horizonte con optimismo y fuerza. Gamonal, Murcia, Argentina, tantos ejemplos de que la presión popular, la lucha continua, la fuerza de la razón abre montañas y puertas. Pese a la mirada un tanto negativa reseñada anteriormente vamos avanzando, ganando derechos, ampliando territorios. Siendo más y con las ideas más claras. Se han ganado batallas y podemos pensar que, más tarde que pronto, podemos seguir ganando otras.
En la Sala de Exposiciones de la Biblioteca Nacional hay una muestra de la cartografía que conserva en sus fondos. Y hay un mapa curioso del siglo XVIII nada menos que del mítico País de Jauja, o Utopia, en el que las montañas, lagos, ríos o ciudades tienen nombres como el Mar de la Lujuria, el Golfo de los Borrachos, el río de la Siesta, el monte de No hacer Nada, las cataratas del Sexo o la Tierra de la Gula. Un país a descubrir. Y ha habitar. No es mala receta para este 2018 que está llamando a las puertas.
Felices fiestas.
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Grandes desafíos por Ecologistas en Acción
Cerca del solsticio de invierno, y tras haber dado una vuelta al sol, hacemos una reflexión sobre este año, que nos deja un poco frías: contamos con algunos logros y mucho camino andado en las propuestas, pero con ausencias importantes hacia los grandes desafíos que tenemos por delante como civilización.
Garoña cierra definitivamente, tras la denegación del permiso de funcionamiento. Un final agónico desde que dejó de producir electricidad en 2013, dando tumbos con el propósito de ampliar el tiempo de funcionamiento del parque de centrales nucleares y dejando ver las irregularidades y oscurantismo en el funcionamiento del Consejo de Seguridad Nuclear.
Lo tachamos de nuestra lista, pero con lápiz, puesto que gran parte de los residuos generados durante los años de actividad se encuentran en la central, y su gestión y custodia no nos da mucha confianza. Al menos en Garoña no se generarán más residuos radioactivos que a día de hoy no se sabe qué hacer con ellos, a pesar de su alta peligrosidad.
La política municipal ha seguido en su tónica: mareando la perdiz, haciendo que hace, intentando quedar bien, pero totalmente continuista en un modelo obsoleto que hace tiempo que está dando señales de alerta y totalmente sordos a las reivindicaciones de la sociedad:
-          La ordenanza de movilidad, sigue trabajando sobre un modelo centrado en el uso del coche, causante del cambio climático, consumidor de recursos fósiles y generador de  desigualdades.
-          La ordenanza de residuos perpetúa el sistema centrado en la gestión de los residuos, sin cuestionar la posibilidad de reducir la cantidad o peligrosidad de los mismos.
Estas dos ordenanzas abordan dos cuestiones claves en la dimensión global que pueden y deben abordarse desde el ámbito municipal: el agotamiento de los recursos energéticos y materiales y el cambio climático.
Y para colmo, se suma la desastrosa gestión del arbolado urbano. Los árboles, aliados en el urbanismo para generar espacios agradables, cobijar otras especies que viven en la ciudad, depurar el aire, fijar CO2… son vistos por el equipo de gobierno como peligrosos seres, eliminado numerosos ejemplares adultos y mutilando otros a través de podas excesivas.
Y con hermetismo en sus posiciones, donde las propuestas y participación de la ciudadanía se ve como una amenaza en lugar de enriquecimiento.
Así que, conscientes de que los cambios que necesitamos deben venir desde la colectividad,  nos hemos unido a otras organizaciones y personas: en el foro contra Garoña, en la plataforma para la conservación del patrimonio natural de la ciudad, en la firma del manifiesto por una movilidad segura y sostenible y formando parte de asambleas.
¡A ver si para el año que viene tenemos más victorias!
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LOTE DE PRODUCTOS EL PERDIGÓN
Este año la revista El Perdigón quiere premiar a sus suscriptores y lectores con una estupenda cesta. El número que coincida con el sorteo de la lotería del día 28 de Diciembre ganará este estupendo lote - estuchado de lujo en madera del cofre del Cid tapizado en terciopelo rojo de traje de macero- consistente en:
Una botella, reserva de cuarenta años con cuna en Trespaderne, del mejor licor de Empatía, Sensibilidad y Tolerancia de la más alta graduación de la marca: Antonio Fernández Santos.
Una exclusiva botella de espumoso de Sinceridad, Transparencia y Sencillez de las bodegas: Javier Lacalle Lacalle.
Un bote de empalagoso en almíbar de Exclusividad, Elegancia y  Potencia intelectiva de la casa Jose Antonio Antón Quirce.
Una caja de bombones de enlicorado de Locuacidad y Vehemencia con etiqueta de: Raúl Borja Salinero Lacarta.
Una tableta de turrón con exterior de yema e interior de hormigonado a base de Cumplimiento, Acabado y Fidelidad de la exclusiva factoría: Carolina Blasco Delgado.
Dulce de Mazapán con masa de Presencia, Exfuerzo y Persistencia de la sociedad de edulcorados: Lorena de la Fuente & Jorge Berzosa.
Frasco de Frutas escarchadas con la Frescura, el Valor y el Protagonismo de la fábrica: Maria Gloria Bañeres de la Torre.Palo de embutido de Humor, Fina literatura y Acierto de la Cooperativa: El Perdigón.
Todo este proceso se hará en riguroso proceso a cargo del Eminente Notario Juan Vicente Velasco el mismo día 28.
Todas aquellas personas que hacen posible
EL PERDIGON
os desean
Felices Fiestas

y un próspero 2018


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